La pregunta del momento. ¿Qué le va a pasar en los próximos meses al mercado inmobiliario?. En estos momentos de incertidumbre, la pandemia, la guerra de Ucrania… Gonzalo Bernardos en una entrevista para Fotocasa Pro, prevé que habrá una ligera caída de las ventas de viviendas pero nada parecido a una burbuja inmobiliaria y con unas perspectivas muy positivas.
No estamos en la cola de Europa
La situación actual es complicada para todo el mundo pero esta vez los que tienen más problemas son los Países Bajos y Alemania. Nosotros no dependemos de Rusia y por eso no nos afecta tanto la crisis. El sector turístico seguirá creciendo después de los récords conseguidos en 2022. La economía podrá caer algún trimestre del año que viene pero se mantendrá el crecimiento. Por otro lado, no tenemos que olvidar el aporte de los fondos europeos y el ahorro conseguido por las familias durante los últimos años. Todo esto aporta una mayor seguridad.
¿Tendremos burbuja inmobiliaria?
En el 2020 el PIB cayó un 11,3%, pero esto no supuso una bajada de la demanda ni de los precios de las viviendas, sino todo lo contrario. Ante esta situación a finales de 2021 podríamos pensar que los precios seguirían creciendo, llegando a una burbuja. Podemos asegurar que no habrá tal burbuja en los próximos años.
Acceso a la vivienda y subida de interés
El aumento del precio de la electricidad, la bajada de las exportaciones de gas ruso, la subida de la inflación y otros factores han afectado a las hipotecas y al crédito. Según el experto los intereses seguirán creciendo a no ser que el euríbor el año que viene alcance valores entre el 3% y el 3,5%, cosa poco probable. Lo más probable es que los bancos no den crédito y los jóvenes tengan aún más problemas para comprar vivienda a pesar de las excelentes cifras de empleo.
¿Bajarán los precios en 2023?
La dificultad de acceso a la vivienda afectará sobre todo a ciudades pequeñas y medianas, en las que hay una oferta grande de viviendas por menos de 150.000 euros. Con la disminución de la demanda, quien quiera vender, tendrá que bajar el precio.
Los tipos de interés afectarán al mercado inmobiliario durante el 2023 y habrá menos financiación que este año, pero no será radical ya que no se prevé una reducción de empleo y los precios de las viviendas no son exagerados.
Más difícil vender y más fácil captar viviendas
El sector inmobiliario tiene que ser optimista, sobre todo las agencias que ofrecen servicios de calidad. 2023 será ligeramente peor que el 2022 y al contrario que durante años anteriores, será más fácil captar que vender. Desaparecerán gestores de fincas o particulares que se dedican a vender viviendas y destacarán las agencias con buenas referencias y servicios de calidad.
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